Milton Friedman, una de las figuras más influyentes en la historia de la economía, es reconocido por su enfoque inquebrantable en la defensa del liberalismo económico y su incansable promoción de la economía de libre mercado. Su legado ha dejado una huella profunda en la teoría y política económica, desafiando las convenciones y defendiendo fervientemente los principios de la libertad individual y la propiedad privada.
Desde sus primeras contribuciones, Friedman se opuso a la intervención estatal en la economía. Argumentaba que los mercados libres y competitivos eran los mecanismos más efectivos para asignar recursos y promover la eficiencia económica. Sostenía que la intervención del gobierno, en forma de regulaciones excesivas o subsidios, distorsionaba los incentivos y generaba ineficiencias.
“Una sociedad que priorice la igualdad sobre la libertad no obtendrá ninguna de las dos cosas. Una sociedad que priorice la libertad sobre la igualdad obtendrá un alto grado de ambas».
Milton Friedman#Fuedicho pic.twitter.com/Da9l6Q6is7— Fuedicho (@fuedicho) July 6, 2023
Uno de los conceptos más conocidos de Friedman fue su énfasis en la importancia de la oferta monetaria y la estabilidad de precios. Abogaba por una política monetaria controlada, basada en una regla clara y predecible, en lugar de decisiones discrecionales. Friedman creía firmemente que el control de la inflación era crucial para mantener la estabilidad económica y evitar los dañinos efectos de la inflación descontrolada.
Además de su enfoque en la política monetaria, Friedman también fue un defensor apasionado de la libre elección y la responsabilidad individual. Se opuso a los impuestos progresivos y abogó por una estructura tributaria más plana, argumentando que esto fomentaría la iniciativa individual y la creación de riqueza. También fue un crítico de los programas de bienestar estatal, sosteniendo que en muchos casos generaban dependencia y desincentivaban el trabajo.
En el ámbito internacional, Friedman defendió la liberalización del comercio y la eliminación de barreras arancelarias. Creía firmemente en los beneficios de la globalización y argumentaba que el libre comercio impulsaba el crecimiento económico y mejoraba el nivel de vida de las personas en todo el mundo.
Aunque el pensamiento de Friedman ha sido objeto de debate y críticas, su legado perdura. Sus ideas han influido en las políticas económicas en numerosos países y han dado forma a la forma en que se entiende y se aborda la economía. Su defensa apasionada del liberalismo económico continúa siendo relevante en el mundo actual, donde las ideas de libre mercado y responsabilidad individual siguen siendo temas clave en los debates económicos y políticos.