La Autoridad Reguladora de Medicamentos, Equipos y Dispositivos Médicos de Cuba (Cecmed) ha emitido un comunicado urgente sobre la circulación de un tipo de ketotifeno falsificado en el país. Según el comunicado No. 18/2023 del Cecmed, este medicamento falsificado, importado desde Haití a través del comercio informal, representa un grave riesgo para la salud de la población cubana. Las autoridades sanitarias advierten que no se pueden garantizar la calidad, seguridad y eficacia de este producto proveniente del fabricante Satda.
El ketotifeno falsificado llega a Cuba en medio de la profunda escasez de medicamentos que afecta a la Isla, pues las autoridades comunistas no han sido capaces de mantener un abastecimiento regular.
Una de las principales características del producto falsificado es que difiere del ketotifeno original fabricado por Stadapharm, con sede en Alemania. Mientras que el ketotifeno auténtico se presenta en cápsulas duras, el falsificado se encuentra en forma de tabletas. Además, el número de identificación NCD, presente en los medicamentos registrados en Estados Unidos, no aparece en el Directorio NCD de dicho país. El Cecmed ha verificado que los números mostrados en las etiquetas de código de barras no se corresponden con la base de datos internacional correspondiente.
Pero eso no es todo, los análisis realizados revelaron que las tabletas falsificadas tienen marcas troqueladas que corresponden a otros medicamentos. Por ejemplo, se encontraron tabletas con identificativo FI 5, que en realidad pertenecen a rosuvastatina cálcica, un medicamento indicado para tratar el colesterol alto y prevenir enfermedades cardíacas y cerebrovasculares.
Otra de las pastillas analizadas mostró el identificativo 5085 V, que corresponde a prednisona, utilizada para tratar diversas enfermedades inflamatorias y alérgicas. Es importante resaltar que ninguno de estos casos tiene relación con el ketotifeno y su uso terapéutico.
El comunicado del Cecmed también destaca que, durante el mes de junio, se han detectado otros medicamentos falsificados en el mercado cubano. Entre ellos se encuentran el clonazepam, una benzodiacepina indicada en algunos casos de epilepsia, y el neurobion, un complejo vitamínico recetado para tratar carencias de las vitaminas B1, B6 y B12. Es alarmante que, según la Sección de Vigilancia del Cecmed, el 80% de los casos analizados de clonazepam resultaron ser falsificaciones. Estos medicamentos adulterados son de los fabricantes Mylan Pharmaceuticals Inc y Boehringer Ingelheim, y se presentan en frascos con diferentes etiquetas y fortalezas. La mayoría de estos medicamentos falsificados provienen del mercado informal de Haití.
El Cecmed enfatiza los riesgos asociados con el consumo de medicamentos falsificados. Además de ser ineficaces para tratar las enfermedades, pueden provocar reacciones adversas y promover la resistencia a los antimicrobianos. También generan desconfianza en la eficacia de vacunas y medicamentos, así como en los sistemas de salud y profesionales sanitarios. Además, representan un gasto adicional para las familias y las instituciones de salud, mientras que benefician a las redes de delincuencia.
El problema es que mientras no haya suministro estable en el país, las personas tendrán que recurrir al mercado informal y no regulado para comprar medicamento en una muestra más de la decadencia del sistema castrista.
