Un joven comunista de la ciudad china de Hanting, se unió al Ejército Popular de Liberación en 1950 y combatió en la guerra de Corea del lado soviético, su índice académico en la escuela no era bueno, pero fue un destacado militante bolchevique.
Su historia como soldado en el frente, se hizo pública un tiempo, a través de cartas que enviaba a su maestro de clase y a su amigo Guao Xinxin, donde les expresaba lo adverso del conflicto y las penalidades que tuvo que soportar.
Por ejemplo, en ellas recitaba el menú de fideos hervidos con nieve y la cercanía de la muerte, de repente, dejó de escribir y su familia recibió la tarjeta de “honor” que tocaba a los desaparecidos en combate.
Sin embargo, en 1991, apareció de sorpresa en su Hanting natal, venía desde Taiwán a ver a sus amigos luego de un largo y silencioso exilio, pero sufrió desagradables sorpresas cuando el ejército le retiró la tarjeta de “honor” por no haber muerto en combate.
De repente había dejado de ser un héroe comunista chino y se convirtió en un contrarrevolucionario de derechas, sin embargo, había traído dólares a China en medio de las reformas económicas de Den Xiaoping.
Den Xiaoping había impulsado una serie de políticas económicas luego de la muerte de Mao Tsé Tung, el malvado estratega comunista chino que basó su ideología en la opresión de las “masas”, y la desconexión del pueblo con el Cielo.
Su acción política del Gran Salto Adelante en 1958, y luego, durante la Revolución Cultural, provocaron hasta los días de hoy, más de 50 millones de víctimas.
Pero fue Den Xiaoping quién retó los principios de Mao, había dicho que no importaba el color de los gatos, “de noches todos son pardos”, dijo, y este apotegma impulsó la fatal reforma económica y cultural de China, donde la tradición fue la principal víctima.
En ese contexto de 1991, cuando nuestro otrora mártir comunista, devenido exiliado taiwanes, entró a China, su historia de vida produjo gran impacto en la mente de sus condiscípulos a través de los éxitos económicos de Taiwán.
El germen del fracaso comunista de Pekín, según el viejo soldado bolchevique:” Radica en la lógica del perverso partido comunista chino, porque las reformas de Den Xiaoping rompieron con la relación entre campo y ciudad, y del hombre con el Cielo”, aseguró, para luego argumentar.
“Estratégicamente las reformas económicas de Pekín se formularon desde la base de la envidia, cuando despojó a los terratenientes de sus propiedades y las entregó a los campesinos, para más adelante y emulando con la Unión Soviética, colectivizar a los campesinos en sovjoses y koljoses, por lo que los terratenientes murieron pobres o se exiliaron, y el campo chino perdió impulso”, dijo y prosiguió contando a sus amigos.
“Pero en Taiwán el Kuomintang actuó correctamente, cuando su reforma agraria compró las propiedades a los terratenientes y las entregó a los campesinos, los antiguos dueños de los campos invirtieron en la industria que miraba a Estados Unidos como socio comercial, y los campesinos se hicieron de clase media, el éxito estaba garantizado”, terminó diciendo el ex-soldado rojo.
En esta suerte de charla, transcurrió la visita del antiguo soldado maoista a casa de su amigo Guao Xinxin en la ciudad de Hanting, donde explicó con certeza su historia personal de éxito y la proyección futura del fracaso del comunismo chino.
Taiwán tiene una historia de éxitos económicos.
Las economías de Taiwán, Hong Kong, Singapur y Corea del Sur son conocidas como los “Cuatro Tigres” asiáticos, que desde 1960 hasta 1990 experimentaron un crecimiento económico del 7% cada año a través de una rápida industrialización, la entrada como socios comerciales de Estados Unidos, y su apuesta por la libertad supusieron este impulso.
Taiwán y Corea del Sur se basaron en la industria electrónica, y Hong Kong y Singapur se convirtieron en centros financieros internacionales. Hong Kong, tras la entrada del partido comunista chino que derrocó su propio principio de “un país, dos sistemas”, luego de la entrada en vigor de la Ley de Seguridad Nacional, ha venido a menos, Taiwán es acosado por el ejército chino.
