La Conferencia de Obispos Católicos de Cuba ha emitido el tradicional mensaje de Navidad para la Isla, y lo han encabezado con uno de los versículos del profeta Isaías: “El pueblo que caminaba en tinieblas vio una gran luz”.
A través de las redes sociales, el cónclave ha llamado al pueblo a no perder la esperanza aunque reinen las tinieblas y que, “allí donde haya miedo, desconfianza, rutina, mentira y odio, Cristo ponga coraje, esperanza, entusiasmo, verdad y perdón”, se puede leer.
El texto recuerda también la visita que hiciera a la Isla hace 25 años, el papa San Juan Pablo II, quien solicitó al régimen cubano que volviera a instaurar la Navidad como un día feriado, “lo cual permite que las personas puedan compartir esta fiesta en familia y participar en las celebraciones en sus respectivas comunidades”.
Los prelados también tuvieron palabras de consuelo para las familias separadas por la migración, las cuales “necesitan de un modo especial que esa luz que encendió Jesús al nacer, brille cálida, mostrándoles su presencia cercana, solidaria, que consuela y reconforta”, refiere el texto citado.
“La Navidad saca lo mejor de cada persona, despierta el amor a la vida, a la familia, crea un ambiente de paz que invita al encuentro con Dios, con los hermanos”, continua el mensaje y hace especial hincapié en mirar con compasión “el dolor y la soledad de tantas personas mayores, enfermas o que padecen graves dificultades y carencias”.
Así mismo, llama a sus fieles a “despertar la alegría y esperanza, en medio de tantas oscuridades y desalientos”.
Sin dudas, uno de los fragmentos más importantes del mensaje es el relacionado con la petición de libertad de aquellos que el régimen mantiene encarcelados por aspirar y soñar un mejor país.
“¡Cuánta alegría traería para sus familias y pueblo en general saber que, en esta Navidad, un buen número de quienes guardan prisión se les otorga la libertad y retornan a sus hogares para reinsertarse en la vida habitual e iniciar así el nuevo año!”, refiere el mensaje de los Obispos cubanos.
Esta no es la primera vez que la Conferencia se pronuncia por la liberación de los presos políticos en la Mayor de las Antillas. En el año 2015 y como parte de la visita del papa Francisco, la Iglesia Católica intercedió por la liberación de más de 3.500 reclusos.
Lamentablemente, sus peticiones para la excarcelación de los antillanos detenidos después de las protestas del 11 de julio de 2021 no han tenido el mismo impacto.
Sin embargo, en los últimos tiempos muchos católicos cubanos se han mostrado inconformes por la actitud casi esquiva de las altas esferas eclesiásticas ante la situación de represión que vive el país, y han visto en la figura del papa Francisco a un simpatizante del régimen castrista, en contraposición a Juan Pablo II, el pontífice más contestatario a la dictadura antillana.
“Que en esta Navidad volvamos a soñar con construir una patria de hermanos, donde cada uno pueda vivir con dignidad, donde nos escuchemos y dialoguemos para discernir el futuro, donde luchemos por el bien de todos, en especial de quienes han quedado marginados por distintos motivos”, reza el mensaje, aunque en este sentido la Iglesia vuelve a ser tibia sobre definir al régimen cubano como lo que es, una dictadura sanguinaria y déspota.
Finalmente, el texto se despide, emitiendo una bendición para todos los cubanos dentro y fuera de la Isla e invocando la protección de la Virgen de la Caridad del Cobre.