Es este el GOLPE que más le va a DOLER a la TIRANÍA
Resumen:
Vemos cómo la excusa del embargo sigue siendo utilizada por el gobierno cubano para justificar sus problemas internos, como en el caso de Cubana de Aviación, que dejó de operar vuelos a Argentina porque no podían abastecerse de combustible. Aunque el gobierno argentino, a través de la empresa YPF, dejó de suministrar combustible por razones vinculadas al embargo estadounidense, lo cierto es que Cuba debe dinero a varios países, y esto también les afecta. Argentina, por ejemplo, no está violando ninguna ley, simplemente cumple con sus obligaciones comerciales, ya que no quiere arriesgar relaciones con Estados Unidos. Mientras tanto, en Cuba, el gobierno sigue insistiendo en culpar al embargo y a las sanciones por su incapacidad para gestionar la economía, como si el bloqueo fuera responsable de todos los problemas del país. La verdad es que muchos cubanos ya no creen en este discurso y se dan cuenta de que el verdadero problema es la falta de libertad y la represión. Por otro lado, se sigue utilizando la propaganda para convencer a la gente de que el bloqueo es la causa de la crisis, cuando en realidad se debe a la mala gestión y a un sistema que favorece la corrupción. Por ejemplo, casos como el de un cubano en televisión, que se ve obligado a justificar su situación alegando que sabe leer gracias a Fidel, cuando es evidente que se trata de una manipulación. También vimos la reciente subida del precio del yogur de soya en Cuba, que se anunció con gran pompa como si fuera un logro, a pesar de que el producto ni siquiera está disponible en muchas provincias. Es ridículo que dos ministerios se reúnan para fijar un precio a un producto que ni siquiera existe en el mercado, y esto demuestra la desconexión total entre el gobierno y la realidad del país.
Detalles:
Esta gente sigue con el invento del embargo. Miren este video, póntelo ahí, George. “Damos lectura, a parte de la declaración del Ministerio de Relaciones Exteriores, sobre la aplicación del bloqueo de Estados Unidos en Argentina, que obligó a Cubana de Aviación a suspender vuelos. En marzo de 2024 la empresa Yacimientos Petrolíferos Fiscales SA. (YPF) de la República Argentina comunicó a la aerolínea Cubana de Aviación su negativa a continuar suministrando combustible a sus aeronaves, en aplicación del bloqueo de Estados Unidos contra Cuba. La empresa Cubana de Aviación buscó innumerables alternativas para mantener las operaciones que ya estaban planificadas y autorizadas por la Administración Nacional de Aviación Civil de Argentina. A través de la imposición de un bloqueo económico, la limitación de inversiones en un determinado país o la restricción a la circulación de personas, bienes, servicios o capitales, se busca provocar el cambio de la forma de gobierno de un país o afectar su derecho a la libre autodeterminación. Cuba seguirá denunciando los casos de aplicación extraterritorial de este bloqueo y demandando el fin de esta política ilegal, que constituye una violación flagrante”.
Ya todos vieron la noticia, los aviones de Cubana de Aviación estaban tratando de comprar combustible en Argentina, pero les dijeron: “No, no vas, no hay más combustible”. Ahí fue el presidente Fernández, ya derrotado en las urnas por el presidente Milei, a Cuba a última hora, a ver si cogía algo. Tienen que patalear, ¿no? Pero mira qué abuso, qué extraterritorialidad… Todo esto se tumba muy rápido porque, primero lo primero: si usted le debe a un país, ¿qué hace todavía comprando fiado? Le debe bastante a Argentina, que todavía le pagaba porque nada de eso se paga al momento. Eso es lo primero.
Lo segundo: ellos alegan una ley en Argentina que condena las leyes extraterritoriales, diciendo que obligan a sancionar. Argentina no está sancionando a nadie, y entre Argentina y Cuba hay relaciones comerciales y diplomáticas. No hay ninguna sanción ahí. Una empresa argentina que tiene intereses en los Estados Unidos, o que tiene acuerdos comerciales, o que es parte de un Estado con relaciones con los Estados Unidos, está cumpliendo con las leyes de Estados Unidos, que condenan a quienes hacen negocios con los que le deben dinero a Estados Unidos y con los que violan una ley que está codificada. Hasta que Cuba no libere a todos los presos políticos, desmantele los órganos represivos, permita la libertad de expresión, de reunión y la legalización de diferentes partidos políticos, y llame a elecciones libres y pluripartidistas, monitoreadas por organismos internacionales, no habrá relaciones comerciales con ese país. Eso dice la ley de Estados Unidos. Incluso flexibiliza esa ley en algunos aspectos, como en los renglones de alimentación y salud; si lo pagan en efectivo, se lo venden. ¿Quién puede estar en desacuerdo con eso?
Argentina no está violando ninguna ley, no está violando su propia ley. No traten de confundir. Los cubanos tontos se quedaron en el partido. Los cubanos tontos son los que todavía tienen el carnet del partido. Si ves a un cubano y le preguntas: “¿Eres cederista?” No. “¿Eres de la federación?” Tampoco. “¿Eres del partido?” Mucho menos. “¿De la juventud?” No. Entonces es un cubano inteligente. Y cada vez hay más cubanos inteligentes y menos tontos que siguen en esa tiranía, por conveniencia o no.
Como ya no hay cubanos tontos, lo que hay son cubanos comunistas, que es lo mismo. Entonces, ¿a quién vas a engañar diciendo que Argentina o el gobierno de Argentina, o el presidente Milei, de ultraderecha fascista como ellos dicen, está violando sus propias leyes? Se les acabó el relajo. No pueden seguir pagando cuando les da la gana, cuando deben millones, y cuando están sancionados por un país que es un aliado en el mundo libre, como lo es Estados Unidos. Así de sencillo. Y cuando la gente sabe eso y reconoce las ventajas de tener aliados en libertad, que respetan la propiedad privada, y no aliados en tiranías que hacen dinero sometiendo a su pueblo, pues rompen relaciones con los delincuentes o se lo ponen difícil.
Yo no tengo nada que hablar contigo. No es Argentina quien está cerrando trato con la tiranía, no es una empresa estatal. Cómprele combustible a otro, cómpralo en otro país, vaya con un barco aparte, no sé, invéntame algo, pero Cubana de Aviación no echa combustible donde hay una empresa que pertenece a un estado, y ese estado tiene relaciones comerciales con un país libre, al que Cuba le debe. Además, Cuba le debe a ese estado también. Entonces, no le paga a nadie y sale llorando cuando lo ponen en su lugar. Así de sencillo.
Un cubano en la calle…
“A buscar a esa gente que está con ellos, porque este, este que tengo yo, gracias a ellos, gracias a que se la jugaron aquí por nosotros, estamos pasando por una situación crítica ahora. Es producto del bloqueo y de la pandemia que ha acabado con todo el mundo. Aquí, otros se desarrollan, otros se atrasan un poquitico, pero, al final de la historia, vamos a salir adelante. Esta situación la vamos a superar porque somos revolucionarios, a pesar de todas las barreras que nos pongan. Para eso Fidel nos preparó…”
Ese es Lalo de Párraga. Ponte el pedacito de Lalo nada más. Ahora quiero que veas el mismo video, pero después de saber esto: es un delincuente de esquina. Fíjate bien en el que está ahí al lado, en el barrio, y nadie le cree lo que está diciendo. Mira lo que es hacer lo conveniente y no lo correcto. Él tiene miedo. Este es un penco.
No tienes que hablar en cámara, yo no te voy a pedir que digas en cámara que hay tiranía para que te caigan a palos, eso sería una tontería. Pero salir a defender a la tiranía y decir que el bloqueo es lo que te tiene así, y encima decir que sabes leer porque Fidel te enseñó… Se ve que es un tipo marginal, con sus collares, su gorrita, su forma de hablar, se nota que no piensa así. Eso se sabe. Mira la cara del que está al lado, cómo lo mira diciendo: «Este tipo está loco, ¿qué está hablando?». Ahí se apagó la cámara o se fue, dijo eso y pensó: «Esto está en candela, esta gente me cogió desprevenido». Si no digo eso, tengo que dejar de vender cigarro en la esquina.
Hazte un zoom en el consorte que está al lado, diciendo: «Este tipo está loco». ¡Miren eso! ¡Este hombre, pero Lalo se volvió loco! ¿Cómo está diciendo estas tonterías por televisión? Tú quieres que me calle, pero yo quiero que la gente me diga. Yo quiero que la gente de Párraga le mande a decir a Lalo que sea serio. Lalo, no seas tan… tan desvergonzado. ¿Cómo vas a salir en la calle, con los códigos de la calle, diciendo esas locuras? Mira al loco que está al lado tuyo, pensando: «¿Qué está hablando este tipo?». Se volvió loco, se comió un loco al revés. ¡Tíralo ahí! Deja que Lalo se desahogue, para eso lo prepararon.
No, no, ya, vamos a quedarnos en Lalo, porque todo el mundo sabe que eso fue de repente. La gente se quedó: «¿Qué digo?». Pero Lalo se lo cogió para él, se metió en el personaje. Se creyó el personaje de la miseria de verdad. Lalo se metió. Ponte la cara, Lalo, que no es que te enseñaron a leer. Tú aprendiste a leer porque fuiste a la escuela, gracias a tu mamá y a tu papá que te educaron. ¿Hasta cuándo el servilismo? ¿Hasta cuándo el descaro? ¿Hasta cuándo la falta de carácter? ¿Cómo que tú sabes leer porque Fidel te enseñó? Pero, ¿qué es esto? ¿Y que todos tus problemas son por el embargo?
Bueno, mira, cógete esto: te subieron el precio del yogur de soya. Ponte ahí, George, ponte el precio del yogur de soya. “La Habana, 29 de abril de 2024, resolución 1.3 CI O 2024 2330. A los directores de los grupos empresariales de comercio, gastronomía y servicio de las empresas de comercio Artemisa, Mayabeque y el municipio especial de la Isla de la Juventud: el precio del yogur de soya…” -Oigan esto: ¡una resolución de un ministerio para ponerle precio a una bolsa de yogur! Dicen ellos que eso es «bloqueo». “A solicitud del grupo empresarial de la industria alimentaria, a través del MINAL y el Ministerio de Finanzas y Planificación, se evaluó”. -Fíjate cuánta gente se tiene que reunir para subir por decreto el precio de una bolsa de yogur de soya. ¿Cuánta gente está aquí en Cuba que me diga desde cuándo en esas provincias…? Ponte ahí, George. Súbete un poquito, a ver cuál provincia es, porque esto es mentira. ¡Yogur no hay!
Pero yo quiero que me digan los de las provincias Artemisa, Mayabeque y la Isla de la Juventud: ¿Desde cuándo tú no ves yogur de soya? Oye esto. Dime tú, que estás en Cuba, ¿dónde estás? ¿Y desde cuándo no ves yogur? ¿Desde cuándo no te venden yogur, como para que esta gente salga con esta farsa de decir que subieron el precio? ¿Qué precio? ¡Si no hay ni yogur!
¿Dónde hay yogur en La Habana, como para que esta gente salga a decir que es un «logro»? ¡No me jodas! Tuvieron que reunirse dos ministerios, ¡dos ministerios, señores!, para ponerle precio a una bolsa de yogur.
MANUEL MILANES Consejo Para la Guerra Anticomunista CPGA
