El congresista cubanoamericano Mario Díaz-Balart ha expresado su preocupación y descontento con la situación de los cubanos que, tras presentarse en la frontera de Estados Unidos con el formulario I-220A, ahora enfrentan la negación de ajustar su estatus migratorio a través de la Ley de Ajuste Cubano. Díaz-Balart, perteneciente al Partido Republicano, calificó la reciente decisión del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) de negar la residencia permanente a tres cubanos con el I-220A como una acción «grotesca» de la administración demócrata de Joe Biden.
El congresista expresó su profunda indignación ante las decisiones que, según él, son «grotescas e irresponsables» de la Administración Biden en materia de inmigración. Estas decisiones han causado confusión, caos e injusticia, especialmente en el distrito 25 del sur de Florida, que Díaz-Balart representa. Recordó que ha estado expresando estas preocupaciones desde el año pasado, poco después de que los cubanos comenzaran a recibir el formulario I-220A del DHS.
Mi declaración sobre cubanos que fueron liberados con el formulario I-220A 👇 pic.twitter.com/VVjbVsMlSx
— Mario Diaz-Balart (@MarioDB) September 13, 2023
Díaz-Balart mencionó que había advertido previamente sobre la política de la Administración Biden hacia los cubanos, sugiriendo que los dejaría en un limbo migratorio. Lamentablemente, sus preocupaciones se han confirmado y aún no ha recibido una respuesta adecuada de la agencia. Para el congresista, esta situación es el resultado de la incapacidad de la Administración Biden para asegurar la frontera, respetar las leyes de inmigración actuales y apoyar a aquellos que huyen de la tiranía.
El republicano prometió seguir luchando por aquellos afectados por el caos actual de la Administración Biden. Criticó la «política» intencional y temeraria de la administración, instándola a asumir la responsabilidad de los problemas que ha creado y a restaurar el orden y la equidad en el sistema de inmigración.
El formulario I-220A es una “Orden de Libertad Provisional” dada por el gobierno de EEUU a individuos detenidos por inmigración y luego liberados. Este formulario obliga a las personas a asistir a audiencias judiciales y a mantener un comportamiento adecuado mientras se resuelve su estatus migratorio. Aunque no es equivalente a un parole, permitía a los liberados aplicar a la Ley de Ajuste Cubano tras una interpretación judicial. Dicho formulario puede incluir detalles sobre citas con el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE).
En contraste, el documento I-220B se otorga a aquellos cuyo caso en corte no fue aceptado, quedando bajo supervisión hasta que se determine su deportación o cambio de estatus. Los portadores de I-220A aún tienen un trámite pendiente en el país.
