El reconocido filántropo y empresario cubano, Manuel Milanés, publicó en su cuenta de X, antigua Twitter, una triste imagen de la humillante comida que reciben los profesores y estudiantes de la Universidad ‘Carlos Rafael Rodríguez’ de la central provincia de Cienfuegos.
En la foto se aprecia el exiguo menú consistente en un plátano hervido, un pan pequeño de 50 gramos y arroz con chícharo. Ese día, 12 de septiembre, al igual que muchas veces en la semana, no se dio proteína.
Esta es la comida de ahora mismo 12 de septiembre de la universidad CARLOS RAFAEL RODRIGUEZ, de cienfuegos cuba pic.twitter.com/cbJpw5JmBA
— Manuel Milanes (@mmpizonero) September 12, 2023
Milanés, con su vasta experiencia como empresario, entiende la relevancia de una buena alimentación para el desarrollo académico y personal de los estudiantes. Por lo cual denuncia a la tiranía castrista por tronchar el aprendizaje de los universitarios que no pueden concentrarse en sus estudios pasando hambre.
En un reciente informe del Programa Mundial de Alimentos (PMA) de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) se identificó a la «Tarea Ordenamiento», implementada desde enero de 2021, como un factor crucial en la crisis alimentaria que enfrenta Cuba en la actualidad.
Según el Informe Anual de Países 2022 del PMA, esta reforma no ha alcanzado los resultados esperados, y la escasez de productos esenciales ha llevado a la inflación nacional. Esta situación se ha agravado con una inflación reportada por el régimen comunista de más del 70%, afectando principalmente a los alimentos. La medida, que eliminó la dualidad monetaria y llevó a cabo una reforma salarial, resultó en un exceso de dinero en circulación, pérdidas económicas en el sector agrícola y una “tormenta perfecta” de altos precios y escasez.
Cuba experimenta falta de alimentos esenciales, incluyendo cereales principales, frijoles, verduras, productos lácteos y carne. Además, el país sigue dependiendo en gran medida de las importaciones, lo que significa que en tiempos de crisis económica, la disponibilidad de productos alimenticios importados disminuye significativamente.
La dieta de los cubanos es deficiente en micronutrientes, con alimentos racionados por el gobierno que cubren solo una fracción de las necesidades nutricionales diarias.