El reconocido youtuber anticomunista Manuel Milanés ha lanzado un nuevo video con denuncias contundentes. En esta ocasión, pone al descubierto las acciones de una pareja de inspectores comunistas en Holguín, revelando una oscura trama de corrupción.
Durante el video, el influencer se sumerge en los detalles de cómo los inspectores cubanos, como parte de una estructura de poder, extorsionan y manipulan a los ciudadanos. El ferviente luchador por la libertad de Cuba relata su experiencia como bodeguero, subrayando cómo estos funcionarios operan bajo una fachada, permitiendo injusticias mientras extorsionan a quienes buscan salir adelante.
Uno de los casos centrales es el de una mujer, inspectora de la Dirección Municipal de Supervisión en Holguín, y su esposo, inspector de transporte. Milanés describe cómo ambos abusan de sus cargos para presionar, recoger sobornos y beneficiarse ilícitamente. Zonas como el estadio de béisbol Carlitos García y tiendas en el centro de Holguín se han convertido en puntos de encuentro para sus actividades corruptas.
El empresario y filántropo detalla como denuncias contra la pareja han sido presentadas ante diversos organismos estatales, pero hasta la fecha, la impunidad parece ser la norma. Ambos, con un perfil público cuestionable, operan un negocio llamado «Catre» en Holguín, donde, al parecer, venden al por mayor artículos obtenidos de manera ilícita.
La vida ostentosa de la pareja, evidenciada en sus vacaciones en hoteles y otros lujos, contrasta con la realidad de muchos cubanos que enfrentan día a día las adversidades de un sistema opresivo. Milanés urge a los residentes de Holguín y Cacocum a identificar y denunciar las acciones de esta pareja.
El video expuesto por el fundador del Consejo para la Guerra Anticomunista (CPGA) concluye con una importante reflexión: “la corrupta tiranía cubana fuerza a sus ciudadanos a actuar de forma delictiva para sobrevivir. Es imperativo tomar medidas y luchar contra estas injusticias”.
“Su forma de vida consiste en extorsionar a otros; tú puedes llevarte bien con ellos, mientras estás robando para que te permitan robar. Pero ambos saben que eso está mal, que es una vileza. Extorsionar al prójimo significa hacer creer que todo está bien en el país y que nadie debería intervenir, de lo contrario, te sancionan”, explica Milanés.