El empresario Manuel Milanés analizó la situación de la mafia de los funcionarios de los bancos estatales en Cuba para burlar las restricciones de corralito bancario y ponerse en contubernio con aquellos que quieren extraer grandes cantidades de dinero.
El luchador anticomunista empieza recordando que él mismo advirtió lo que pasaría con el CUP bancarizado y el que está en efectivo en poder de la población. Los pronósticos se cumplen con un CUP en efectivo valuado en un 10% más que el dinero digital en los bancos de la dictadura, que no se puede sacar y solo está disponible en transferencias.
“¿Recuerdan que yo dije?”, inicia Milanés en su característico estilo directo para recordar que los negociantes cubanos vieron en esa situación una oportunidad de beneficio poniendo un pequeño margen comercial al precio del CUP en efectivo.
Sin embargo, Milanés advierte como la situación de corralito bancario por parte del régimen castrista ha dado lugar a una especie de mafia con funcionarios bancarios. Detalla cómo aquellos con conexiones externas y acceso a efectivo están aprovechando el sistema para obtener ganancias adicionales. Milanés describe un intrigante esquema donde los primeros cientos de pesos depositados en el banco son separados por los funcionarios para beneficiarse personalmente. Esto, según Milanés, ha llevado a una realidad distorsionada en la que la prioridad es servir a los intereses personales en lugar de satisfacer las necesidades del público.
“Así funciona la mafia. Se lo voy a describir: Yo tengo cien pesos. Tú me llamas que necesitas cien pesos. Yo te digo: Transfiéreme ciento treinta a mi cuenta, te doy mi cuenta. Tú transfieres ciento treinta. Yo voy al otro día al banco, y mis ciento treinta están por arriba de todo el mundo, porque yo tengo una cajera que los primeros ciento treinta que entran me los guardan a mí. ¿Por qué? Porque yo le doy a ella diez. Pues yo le doy a cinco. Pues yo le doy a uno. Entonces, cada vez que me das ciento treinta, va a ganar cinco, diez, uno. Pues, mis ciento treinta van a ser los primeros. Y así lo hago todos los días. Al otro día, tengo ciento treinta”.
Para afianzar su idea Milanés expone un testimonio de una cubana que publicó en Facebook su experiencia personal al ir a un Banco Popular de Ahorro.
