En un diálogo entre Manuel Milanés y el deportista cubano Gustavo Trujillo sostenido en el nuevo canal de YouTube de este último, que se denomina Moliendo Chatarra, el empresario confesó que a través de los años donde ha mantenido un contacto directo con el exilio histórico que se asentó en Miami puede afirmar que ellos están contentos con las nuevas generaciones. Sin embargo, tienen temor de una cosa.
“Yo soy testimonio vivo de que el exilio histórico está contento con las nuevas generaciones. Pero lo que el miedo del exilio histórico cubano es que ellos murieran y que la tiranía lograra confundir de que el problema de Cuba era económico, no político. Que lo que había que hacer era salir, regresar, vivir en eso y entonces que se muriera su legado”, explicó el youtuber.
En consecuencia, Milanés resalta la importancia de mantener viva la memoria histórica del exilio cubano. Por ello, el filántropo encabeza la batalla por desmantelar la narrativa de que el problema en Cuba es meramente económico. Su firme creencia en que la raíz del problema es política y que la justicia es necesaria para todos los presos políticos y sus familias.
Durante la conversación, el empresario conecta con la historia y la memoria de quienes han dado su vida por la libertad cubana. Su profundo respeto por el exilio histórico cubano y su dedicación a preservar su legado son palpables. La visión de calles convertidas en museos, donde cada rincón cuente la historia de la lucha anticomunista, ilustra su enfoque visionario para la transformación de Cuba.
“Los niños en Cuba tienen que saber, prohibir el comunismo, enseñar lo que de verdad pasaba en las mazmorras de la tiranía”, declaró Milanés.
“Entonces, por respeto a ellos, ahora si ellos ven que aunque esto dure cinco, diez años más. Ya ellos no tienen que estar vivos para que eso se cumpla. O sea, hay una promesa con ellos que no va a haber impunidad, que no es venganza, que es justicia”.
