Por tercer curso consecutivo, los estudiantes cubanos no tendrán que aprobar los exámenes de ingreso para entrar a la universidad, incluso el Ministerio de Educación Superior ofertará plazas para aquellos que ni tan siquiera se presentaron a las convocatorias de pruebas.
En el próximo curso escolar, se han puesto a disposición un total de 115,327 plazas universitarias en las tres modalidades de estudio: Curso Diurno, Curso por Encuentros y Curso a Distancia. En el caso del Curso Diurno, se mantienen dos convocatorias de examen: la ordinaria y la especial.
Se establecerán cuatro niveles de otorgamiento de carreras. El primero estará destinado a aquellos que hayan aprobado todos los exámenes de ingreso, mientras que el segundo será para aquellos que no hayan logrado superar dichas pruebas.
El tercer nivel se reserva para aquellos estudiantes de preuniversitario que hayan decidido no presentarse a los exámenes de ingreso durante el año de su graduación.
Finalmente, el cuarto y último período de otorgamiento es para los aspirantes egresados de la enseñanza técnica y profesional, la Facultad Obrero Campesina, preuniversitarios de cursos anteriores y otros que considere la Comisión de Ingreso Provincial.
Además, para el próximo curso se mantendrá «el estímulo» para los tres mejores graduados de la Educación Técnico Profesional, quienes tendrán la oportunidad de obtener una carrera universitaria sin someterse a un proceso de ingreso convencional. El mejor graduado recibirá una carrera relacionada con su especialidad, mientras que los dos siguientes obtendrán carreras de perfil pedagógico acorde con su área de especialización.
Finalmente, se destaca que tres carreras universitarias, Periodismo, Relaciones Internacionales y las que integran la Universidad de las Artes (ISA), se otorgarán mediante pruebas de aptitud en lugar de exámenes de ingreso tradicionales.
Por otra parte, el Ministerio de Educación Superior (MES) reveló la realización de un «experimento» en las provincias de Pinar del Río, Villa Clara y Holguín. Estos territorios tendrán la autonomía para decidir la cantidad de plazas universitarias que le harán falta cada año en las carreras de Ciencias Médicas y Pedagógicas, Ingeniería Agrónoma, Contabilidad y Finanzas, Ingeniería Informática, Derecho, Ingeniería Industrial, Gestión Sociocultural para el Desarrollo y varios programas de formación de Técnicos Superiores.
