Los datos que ofrece la Oficina Nacional de Estadísticas e Información (Onei), controlada por el régimen comunista, nunca deberían ser confiables, pero aun maquillándolos son alarmantes. Durante el mes de mayo de 2023, los precios de los alimentos aumentaron un 66.5%, siendo parte importante junto al transporte de la inflación generalizada que se situó en el 44.5% interanual.
Hay dos alimentos que son responsables de casi un tercio del incremento general: la carne de cerdo y el arroz, ambos en la categoría de “alimentos y bebidas no alcohólicas”, medida por la Onei.
1/7 La inflación sigue estando fuera de control en Cuba. Es lo que indican los datos oficiales publicados hoy, con un crecimiento interanual de 45,5% del índice general de precios de consumo y de 66,5% de los alimentos pic.twitter.com/jZFOORVTrG
— Pedro Monreal (@pmmonreal) June 16, 2023
Cualquier crecimiento de dos dígitos es nefasto para una economía, la cubana viene exhibiendo esas cifras prácticamente desde que comenzaron a sentirse los efectos de la errada “Tarea Ordenamiento”, en vigor desde enero de 2021.
Los datos muestran un empobrecimiento acelerado del hogar promedio cubano que ve como se “quema” su dinero, pues el alza de precios sostenida hace que pierda poder adquisitivo.
La inflación es el aumento sostenido y generalizado del nivel de precios en una economía durante un período de tiempo. Cuando el nivel general de precios sube, con cada unidad de moneda se adquieren menos bienes y servicios. Es decir, que la inflación refleja la disminución del poder adquisitivo de la moneda: una pérdida del valor real del medio interno de intercambio y unidad de medida de una economía.
Imagina que tienes 250 pesos cubanos (CUP) y quieres carne de cerdo. En mayo de 2022 podías comprar hasta dos libras. En la actualidad con ese mismo dinero no te alcanza ni para una libra. Eso significa que el dinero ha perdido valor, porque ya no puede comprar la misma cantidad de cosas.
El régimen castrista intenta culpa a la guerra en Ucrania, la situación mundial con la cadena de suministro o al carácter especulador del sector privado en Cuba, que vende más caros sus productos y servicios.
Sin embargo, la única responsabilidad por la alta inflación la tienen los dirigentes comunistas, que desde hace más de 64 años tienen un control absoluto de todas las actividades económicas de la Isla, desde hacer el pan de la bodega hasta construir majestuosos hoteles para un turismo que no llega.