Un trágico incidente ocurrió este domingo 11 de mayo cuando el joven cubano Humberto Rodríguez perdió la vida a causa de un disparo recibido mientras pasaba de forma obligada el Servicio Militar en Palma Soriano, Santiago de Cuba. Según informó Jeissy Borrel en redes sociales, Humberto perdió la vida a causa de un disparo accidental con un arma de fuego mientras se encontraba de guardia en la unidad conocida como Combustible.
Una vecina de la familia de la víctima, que prefirió mantenerse en el anonimato, aseguró a CubaNet que el joven recibió el disparo de otro recluta inexperto. «Ponen armas en manos de muchachos que no saben usarlas y pasan estas desgracias», comentó la fuente, añadiendo que la familia de Humberto está devastada ya que él era el único hijo de su madre.
Este trágico suceso no es un hecho aislado. Hace apenas unas semanas, Maikol Arcia Hernández, natural de Güines, Mayabeque, se quitó la vida mientras cumplía con el Servicio Militar Obligatorio. A pesar de que el joven había manifestado sus deseos de autolesionarse, los directivos de la unidad restaron importancia a sus preocupaciones, calificándolas de «malcriadeces».
El Servicio Militar Activo, establecido en el Decreto-Ley 224 de la ley de Defensa Nacional, obliga a los ciudadanos cubanos de sexo masculino entre los diecisiete y los veintiocho años a cumplir un período de dos años en el ejército. Incluso aquellos que han ingresado a la universidad ven reducido este período a la mitad, pero siguen estando sometidos a esta obligación. Cabe destacar que el Servicio Militar ha sido una imposición en Cuba desde junio de 1963, justificada por el gobierno como una medida de defensa ante una posible invasión estadounidense que nunca ha ocurrido.
Los cubanos que finalmente cumplen con el periodo obligatorio en la vida militar arrastran varios traumas de esa experiencia. No pocos de ellos acuden al suicidio que está reconocida entre las 10 principales causas de muerte en Cuba.
