La congresista cubanoamericana María Elvira Salazar presentó en la Cámara de Representantes de Estados Unidos su proyecto de reforma migratoria nombrado Ley Dignidad, que contiene una solución para poner fin a la crisis migratoria regularizando el status de los migrantes, incluido miles de cubanos
La Ley Dignidad tiene como objetivo principal establecer vías para regularizar la situación de más de 11 millones de inmigrantes indocumentados que residen en Estados Unidos. El proyecto también contempla el aumento de los recursos destinados a la seguridad fronteriza, así como una reforma en el proceso de solicitud de asilo en la frontera.
Hoy presenté la Ley Dignidad: ¡El Congreso tiene que actuar y acabar con la crisis migratoria de una vez por todas! pic.twitter.com/B7l5IdxFwr
— María Elvira Salazar 🇺🇸 (@MaElviraSalazar) May 23, 2023
“Es la ley más importante que voy a presentar durante mi tiempo en el Congreso Federal, La Ley Dignidad que es una reforma migratoria completa. No tiene que ver con republicanos ni con demócratas. (…) ¡El Congreso tiene que actuar y acabar con la crisis migratoria de una vez por todas!”, comentó la representante electa por el distrito 27 de la Florida mediante un mensaje audiovisual desde sus redes sociales.
Como muestra de la importancia del tema donde ambos partidos políticos deben actuar en favor del bien común Salazar unión fuerzas con la congresista demócrata Verónica Escobar, quien también impulsa la reforma.
Esta no es la primera vez que la cubanoamericana presenta la Ley Dignidad ante el Congreso. En las otras ocasiones no ha logrado la aceptación total de la mayoría, aun cuando la Cámara tiene mayoría republicana. Sin embargo, ahora con el trabajo bipartidista espera que si pueda salir adelante al menos en ese recinto legislativo.
Entre los elementos esgrimidos por algunos de sus colegas que han rechazado la propuesta se encuentra algunos requisitos polémicos como el pago al Gobierno que deben hacer las personas en situación migratoria irregular para ser regularizados.
Por ejemplo, la normativa contempla que las personas migrantes que lleven más de cinco años en EEUU sin papales deberán pagar anualmente 700 dólares hasta llegar a una restitución total de 5.000 dólares. Al iniciar este proceso el inmigrante recibirá permisos de trabajo y de viaje para que pueda salir y entrar a EEUU legalmente.
Sin embargo, debe pasar siete años en ese “estatus de dignidad” sin tener derecho a servicios o programas sociales. Luego de este tiempo, que puede ser prorrogable, deberán pasar otros cinco años para poder solicitar la ciudadanía estadounidense. Según la propuesta de ley, la recaudación de ese dinero es necesaria para emplearla en la seguridad fronteriza.
Para elaborar el texto se hicieron consultas con líderes empresariales, representantes del sector agrícola y ganadero, líderes religiosos, grupos de reforma migratoria y expertos en seguridad fronteriza.
Sin embargo, Verónica Escobar, que impulsa la propuesta, afirma su disposición a trabajar con aquellos que tengan mejores ideas, pero el objetivo es tener cuanto antes una ley que haga frente a los desafíos de los migrantes en EEUU al mismo tiempo que solucione el problema en la frontera.
