Ahogada en una enorme crisis económica, la dictadura castrista pactó con el régimen de Vladímir Putin entregar tierras cubanas a “inversionistas rusos” bajo la modalidad de usufructo por 30 años.
De tal manera se hipoteca el futuro del país en beneficio de la cúpula militar que busca que el zar ruso los proteja a costa de entregar la soberanía nacional en un hecho sin precedentes. La operación de entrega de tierras con el camuflaje de producción agrícola también podría suponer una cortina de humo para que los rusos establezcan bases militares en toda la Isla. La privilegiada posición geográfica de Cuba siempre ha sido un anhelo para Rusia, máxime en la actualidad, donde está envuelta en un conflicto bélico en Ucrania.
De acuerdo con la agencia Reuters, la decisión de los dirigentes cubanos fue informada por Boris Titov, jefe del Comité Empresarial Cubano-Ruso que acontece por estos días en La Habana, quien calificó el tema como un “trato preferencial” de los cubanos a su aliado euroasiático.
El discurso inaugural de Titov en la reunión que se lleva a cabo en el Hotel Nacional reveló que el “camino es claro” hacia una mayor relación de interdependencia de Cuba con Rusia, ya que también lograron que las empresas rusas no paguen aranceles de aduana cuando importen tecnologías al país y podrían repatriar la totalidad de sus ganancias.
El encargado de Putin para velar por los intereses de los empresarios aliados a su mandato recordó que “en la época soviética había un enlace marítimo y portuario directo” entre La Habana y Moscú, por lo cual está enfocado en restablecerlo para fortalecer su posición estratégica dentro de la privilegiada ubicación geográfica de Cuba.
Por su parte, Ricardo Cabrisas, ministro de Comercio Exterior de Cuba, afirmó a los periodistas durante el foro que los lazos económicos entre Rusia y Cuba tienen un solo camino: el del fortalecimiento. “Nada ni nadie puede detenerlo”, aseguró el veterano comunista que ha estado encargado en los últimos años de las negociaciones de la deuda de Cuba con Rusia y otros acreedores internacionales.
Además, se supo que el comercio bilateral entre Cuba y Rusia alcanzó los 450 millones de dólares en 2022, triplicando la cifra registrada en 2021. Sin embargo, es importante destacar que la mayoría de este intercambio presenta un déficit negativo para Cuba, ya que importa desde la nación euroasiática petróleo y aceite de soja.
