Tras dar a luz a trillizas, una madre cubana ha sido olvidad a su suerte por parte de las autoridades gubernamentales de la provincia de Camagüey, reportó el medio independiente Periódico Cubano.
La denuncia fue hecha a través de las redes sociales por la abuela de las niñas, identificada como Nidia Ávila y quien asegura que ni su hija ni sus nietos tienen un techo sobre sus cabezas y, mucho menos, comida para alimentar a la recién parida y a las pequeñas.
Actualmente, tanto la madre de las trillizas como las niñas, se encuentran internadas en el Hospital Materno de Camagüey y no han podido comprar ni la canastilla que le corresponde, pues no cuentan con el dinero para hacerlo.
“¿Dónde quedó el concepto de revolución? Mi hija, paciente del Hospital Materno de Camagüey, donde ha estado desde octubre por traer un embarazo múltiple de trillizas, siendo estos casos unos de los ‘logros de la salud cubana’, ya que la misma es una ‘potencia médica mundial’, y le brindamos ayudas solidarias y humanitarias a otros lugares del mundo”, escribió enojada la mujer.
Así mismo, se pregunta “¿Dónde está la ayuda que se le brinda a los ciudadanos de este país?”, asegurando que el auxilio que han recibido llegó de parte de la Iglesia Adventista de Camagüey, cuyos miembros han estado en el hospital ayudando a la familia con donaciones de ropas para las niñas y algunos artículos de primera necesidad.
En la denuncia, Ávila hizo referencia a que el único módulo del cual les han avisado, tenía un costo de 10 mil pesos por las tres niñas, y además, fueron notificadas de un día para el otro, por lo que, al no contar con el dinero, se le asignó a otra persona sin darles más explicaciones a ella.
Del mismo modo, se supo que la familia tampoco ha sido visitada por los organismos competentes, ni siquiera de los que se ubican dentro del mismo hospital.
Además de las trillizas, la hija de Nidia tiente tres niños más, por lo que la cubana empieza a estar desesperada ante la situación que se le avecina, al estar en la calle con seis niños de los cuales ocuparse, justo cuando el país atraviesa una de las peores crisis de alimentos y escasez.
Aunque ya han pedido ayuda a las autoridades del municipio de Florida donde residen, la única respuesta que han obtenido provenía de un funcionario identificado como “Enrique”, quien le aseguró que “le podía hacer una casa de madera y se la ubicaba donde él quisiera porque era el jefe”.
“No estamos pidiendo una mansión para esos niños, sino un techo donde puedan vivir sin preocupación y estén protegidos en tiempo de ciclón ¿Dónde puedo ser escuchada y dirigirme, o es que tampoco tenemos ya un gobierno?”, se cuestionó Ávila.