El Departamento de Defensa de los Estados Unidos informó que está desarrollando una investigación en animales para recrear el llamado Síndrome de La Habana, un fenómeno hasta el momento desconocido que provocó afectaciones en la salud del personal diplomático estadounidense de misión en la capital cubana.
Los investigadores buscan determinar si ondas de radiofrecuencias pueden generar afecciones en la salud y secuelas celebrarles, como las registradas en los pacientes, que presentaron dolores de cabeza, pérdida temporal de la audición, vértigo, náuseas, desorientación, entre otros síntomas.
The Pentagon is backing animal experimentation in an attempt to determine the cause of the mysterious “Havana Syndrome” that has afflicted scores of government personnel abroad, according to a new report from Politico. https://t.co/8yVhZLcg8N
— The Daily Beast (@thedailybeast) March 10, 2023
El portavoz del Departamento de Defensa, la teniente comodoro Tim Gorman, confirmó que la subvención de 750.000 dólares otorgada a la Universidad Estatal de Wayne involucra hacer pruebas de laboratorio en animales para simular una lesión cerebral por conmoción.
Los estudios histológicos, de imágenes y de comportamiento determinarán si el modelo es comparable a las anomalías observadas en humanos. Al mismo tiempo, se busca que el modelo pueda usarse posteriormente para probar tratamientos potenciales con el fin de aliviar los déficits asociados con lesión cerebral traumática.
La semana pasada, la Oficina del Director de Inteligencia Nacional emitió un informe donde indica que no hay evidencia creíble de que un adversario extranjero haya causado los incidentes de salud.
La directora de Inteligencia Nacional, Avril Haines, dijo en un comunicado el 1 de marzo que las agencias de la comunidad de inteligencia “evaluaron que los síntomas informados por el personal estadounidense probablemente fueron el resultado de factores que no involucraron a un adversario extranjero, como condiciones preexistentes, enfermedades convencionales y factores ambientales”.
Sin embargo, ninguno de los estudios realizados con anterioridad ha sido capaz de dar una explicación plausible con alto grado de seguridad sobre las misteriosas dolencias, en un principio atribuidas a un “ataque sónico” con algún arma sofisticada.
Lo cierto es que los incidentes que iniciaron en La Habana luego se extendieron a otros países, como Vietnam, China y Alemania, donde también resultaron afectados diplomáticos y personal de inteligencia de EEUU.
El régimen cubano apoya la teoría, tampoco comprobada, de que se trata de un evento de histeria colectiva que está en la psiquis de aquellas personas que se dijeron afectadas por los “ataques sónicos”.
Por el momento, el Congreso de EEUU aprobó una partida presupuestaria para indemnizar a los ciudadanos del servicio exterior que no han podido retomar su vida laboral normal producto de las lesiones sufridas.