Todos hemos sido nuevos en bolsa. Todos hemos cometido errores fatales y todos hemos perdido dinero (sobre todo al principio). La clave está (como todo en la vida) en aprender la lección e ir poco a poco optimizando nuestra operativa.
Cuando yo empecé en los mercados, recuerdo tener un gran afán por el riesgo y la volatilidad: me sentía como pez en el agua cuando teníamos noticias importantes que atizaban las bolsas y hacían que estas se moviesen de arriba a abajo como un ascensor.
Me encantaba entrar y salir de acciones justo antes de eventos clave o de noticias importantes (incluso de resultados, algo que prohibo a mis alumnos en el curso premium de bolsa). Era una lotería, pero yo no me daba cuenta.
Hasta que un día pasó lo que era de esperar: compré bastante cantidad de un activo que tenía un evento importante al día siguiente. Cuando la fecha llegó, suspendieron la cotización y perdí un 50% de mi dinero. En tan solo minutos. Aprendí la lección.
Te cuento todo esto porque ayer tuvimos un evento que me hizo recordar muchas de estas aventuras. Ayer tuvimos una rueda de prensa del Jerome Powell, el presidente de la Reserva Federal en el evento anual más importante para un banco central: Jackson Hole. Y lo vi venir.
El día anterior a la rueda de prensa, es decir, el jueves, anuncié por redes sociales mi recomendación de vender aquellas posiciones que se tuviesen abiertas (sobre todo en swing) por temor a lo que pudiese ocurrir en este evento.
Lo que ocurrió es historia: nada más terminar la rueda de prensa de J. Powell, el mercado se desplomó cerca de un 3%, la caída más grande en los últimos 3 meses, y con empresas cayendo a doble dígito.
El tema aquí está en que qué necesidad había de estar invertido mientras Powell hablaba. Es cierto que podría haber dicho maravillas y haber disparado el mercado, pero eso ni tu ni yo lo sabemos. Se que el ser humano siente la necesidad de apostar cuando pasan estas cosas, pero un inversor inteligente no hace eso. Nosotros no hacemos eso.
Por lo que más quieras, la próxima vez que haya un evento señalado en el calendario, ya sean datos macro, conferencia de X o Y presidente o resultados empresariales, no estés invertido. No trates a la bolsa como un casino. Por favor, hazme caso en esto. Te prometo que te ahorrará mucho dinero.
Siempre es preferible dejar de ganar a perder. O como decía mi abuelo: más vale pájaro en mano que cien volando. En el mundo del swing trade y la inversión ya hay muchas cosas que están fuera de nuestro control. Por favor, no añadas más pólvora al cóctel porque seguramente explote en tu cara.