Ya sea que esté hablando en una reunión en el trabajo o teniendo una conversación con un amigo, tener a alguien hablando por encima de usted es frustrante y, a veces, puede parecer simplemente grosero.
- PREPARA UNA FRASE ESPECÍFICA
Tener una respuesta preparada cuando lo interrumpen puede hacer que sea más fácil reconocer que está sucediendo y hacer que la otra persona confirme que ahora es su turno de hablar. Bausch recomienda encontrar una frase que funcione para usted.
Por ejemplo, podrías decir “¿Te importaría si termino?”. «Entonces cállate», dice ella. “Eso a menudo evitará que alguien hable sobre ti”.
Lo que no funciona es decir: «Oye, deja de hablar sobre mí» o «Oye, no escuchaste lo que tengo que decir», dice Bausch. “Creo que eso le da agresividad”, dice. “Eso es realmente lo que no quieres si quieres tener una conversación saludable”.
- ESPERA UN DESCANSO
Otra opción es dejar que la persona termine su pensamiento. Luego pregunte: “¿Terminaste? Porque me gustaría terminar lo que estaba diciendo”. “Haz que participen en eso”, dice Bausch. «Cuando digan ‘Sí, he terminado’, con suerte estarán dispuestos a escuchar lo que tienes que decir».
Matt Eventoff, fundador de Princeton Public Speaking, una firma de coaching de comunicación ejecutiva, está de acuerdo. “Creo que la mejor práctica es dejar de hablar, incluso sonreír, y esperar el próximo descanso o hacer una pausa en la conversación, incluso si es unos minutos más tarde”, dice. «En ese momento, vuelva a insertarse en la conversación diciendo, con voz amable, ‘Como discutimos antes’ o ‘Continuando con mi pensamiento anterior'».
- LEVANTA LA MANO
Si no se produce un descanso a los pocos minutos de la interrupción, levante la mano, sugiere Eventoff, especialmente si está en una reunión grande.
“Es sorprendente cómo los ejecutivos, y casi todo el mundo, responde a una mano levantada”, dice. “Funciona con la misma eficacia que en la escuela. El punto general es mostrar profesionalismo y paciencia, lo que ilustra aún más por qué la interrupción o la conversación no estuvo bien”.
- CUIDA TU LENGUAJE CORPORAL
Colóquese de una manera no verbal más asertiva, sugiere Suzanne E. Boys, Ph.D., profesora educadora y directora interina de la Facultad de Comunicación, Cine y Estudios de Medios de la Universidad de Cincinnati. Por ejemplo, inclínese hacia adelante, establezca un fuerte contacto visual, levante un dedo o una mano, o toque el brazo de la otra persona, si corresponde. “Esto le indica al orador que está listo para hablar”, dice ella.
Además, deja de ofrecer pistas no verbales y paralingüísticas que te posicionan como oyente. “Estas señales son útiles mientras escuchas, pero si quieres pasar de ese rol al rol de hablante, indícalo”, dice Boys. Por ejemplo, deja de asentir, de “mmm-hmmm-ing” o de mirar hacia otro lado.
- ABORDAR EL PROBLEMA DIRECTAMENTE
Después del incidente, Haiken recomienda apartar a la persona. “Asuma una intención positiva”, dice ella. Por ejemplo, podrías decir “Estoy seguro de que no hiciste esto intencionalmente, pero me interrumpiste en la reunión. Sé que tienes grandes ideas, pero ¿podrías tratar de ser un poco más consciente?”
Si bien puede parecer que tus pensamientos están siendo descartados, Boys dice que no lo tomes como algo personal. “Revise sus suposiciones acerca de interrumpir”, dice ella. “A menudo, a las personas de menor poder se les ha dicho que interrumpir es descortés. Sin embargo, en ciertos contextos, con ciertos tipos de comunicadores, interrumpir es la única forma de obtener la palabra”.
Esté preparado con algunas formas de recuperar la habitación. “Simplemente dile a la persona que la vas a interrumpir”, dice Boys. “Por ejemplo, en una conversación con un hablante dominante, podrías simplemente decir: ‘Te voy a interrumpir aquí’. Luego, hazlo”.