El fiel defensor del régimen comunista Yusuam Palacios Ortega fue destituido como presidente del Movimiento Juvenil Martiano (MJM), cargo que desempeñó durante los últimos 12 años.
La primera secretaria nacional de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC), Aylín Álvarez, fue la encargada de presidir el acto de liberación y designación de Orlando Ernesto Pérez Núñez, como nuevo dirigente que hasta entonces se venía desempeñando como vicepresidente del MJM.
“Todo el Consejo reconoció la labor de Yusuam Palacios Ortega, su entrega y defensa de lo más profundo del pensamiento de Martí”, expresó Álvarez en la reunión, sin mencionar cuál será la nueva tarea para el licenciado en Derecho, quien actualmente también es diputado a la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP).
Precisamente desde su condición de diputado llegó una de las declaraciones más ridículas y que fueron cardo de cultivo para muchos memes y burlas. A Palacios Ortega se le ocurrió comparar a Fidel y a Raúl Castro con Jesucristo. “Si Cristo repartió los panes y los peces un día, el Comandante en Jefe Fidel Castro, el General de Ejército [Raúl Castro] y nuestros dirigentes de hoy han estado repartiendo los panes y los peces por más de 60 años”, dijo el ahora ex dirigente del MJM.
Hace solo una semana Palacios viajó hasta Santiago de Cuba con una amplia delegación de miembros del MJM, haciendo un gasto tremendo al erario público, para tomar el fuego de la “llama eterna” del cementerio de Santa Ifigenia y trasladarlo a La Habana en un quinqué.
La iniciativa llamada “quinqué martiano” recorrió todas las provincias para llegar a la capital y protagonizar la marcha de las antorchas el 27 de enero próximo. Sin embargo, no pudo llegar a la fecha como dirigente tras ser destituido.
El MJM arriba al aniversario 34 de su fundación en medio de la peor crisis económica, social y política de Cuba desde que los comunistas tomaron el poder por las armas en 1959.
Incluso el propio aparato de propaganda ideológica reconocido recientemente en los medios de prensa que el país vive una crisis de valores como el Patriotismo, pues los cubanos no ven viable en la Isla la posibilidad de realizar sus proyectos de vida.