Al éxodo masivo de cubanos por mar o por tierra, se le suman, historias sorprendentes de personas que logran pasar las barreras de seguridad de los aeropuertos y viajar como polizón. Rafael García escapó de la Isla, en un avión desde Santiago de Cuba.
García era trabajador del Aeropuerto Internacional ‘Antonio Maceo’ de la mencionada provincia oriental, y según le comentó a la periodista Jany González, de Univisión 23, quiso irse por las amenazas de su jefe, luego de que él ayudara a un pasajero que viajaba a Nicaragua.
La acción la realizó el joven el pasado 29 de octubre, cuando se disfrazó de tripulante de la aerolínea SwiftAir, y viajó hasta Miami como polizón.
El santiaguero contó a la periodista, que él conocía todo el manejo del aeropuerto y para dónde se ubicaba la vista de “las pocas cámaras que sirven allí”. De igual manera, dijo que se cortó el cabello bien bajito, y se puso una mascarilla, lo que impidió que sus compañeros del otro turno de inmigración, con el que no tenía mucho roce, no lo identificaran.
El cubano de 24 años, que pasó varios días planificando la operación, llegó a Miami y se entregó a las autoridades migratorias de Estados Unidos, y desde entonces se encuentra en el Centro de Detención de Broward.
Los datos de García está dentro de los seis mil que se filtraron de forma involuntaria por alrededor de cinco horas por el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas de Estados Unidos (ICE, por sus siglas en inglés), situación que preocupa al antillano, pues ahí hay información incluso de sus declaraciones.
En estos momentos, el ex trabajador aeroportuario espera su juicio el 28 de enero de 2023, y su mayor miedo es que enfrente una deportación, al país del cual tuvo que escapar.
A finales de noviembre se conoció que otro cubano, Yunier Castillo, quien laboraba en el Aeropuerto Internacional ‘José Martí’ de La Habana, se hizo pasar como pasajero en un vuelo de JetBlue y arribó a Miami, donde también enfrenta un caso de deportación.
Castillo, le dijo al periodista Mario Vallejo que había llegado hace seis meses, y lo tenían detenido desde entonces en el Centro de Detención de Inmigrantes de Pompano Beach, en el condado de Broward.
Asimismo, el migrante le dijo al reportero que puede enfrentar en Cuba una sanción de “más de 25 años de prisión por haber desertado, por haber venido escondido en un avión. Yo tengo un niño pequeño y tengo la incertidumbre de lo que pueda pasarme”.
Hasta el momento, no ha llegado a la Isla ningún avión con deportados que hayan llegado a Estados Unidos, pero se espera que próximamente la acción se concrete.