Antes de nada, empecemos por el principio: ¿Qué es el apalancamiento en bolsa?
Pues no es otra cosa que deuda. Cuando compramos acciones con un apalancamiento 1:2, por ejemplo, significa que por cada dólar que nosotros ponemos nos están prestando otro. De esta forma, si compras 1000 en acciones de Apple con este apalancamiento, realmente estás comprando con 2000.
La gracia aquí reside en que los rendimientos que generas son sobre el capital total. De esta forma, si ganas un 10% en esta operación en Apple, estarías ganando 200 (10% de 2000) en lugar de 100 que hubieses ganado sin emplear esta herramienta.
Pero esto tiene una gran cara oculta… Puede liquidarte muy fácilmente. Al estar empleando deuda, nunca puedes estar perdiendo más de lo que has invertido. Así que, si en circunstancias normales perderías todo tu dinero, si la acción cae un 100%, si empleas apalancamiento 1:2 con que el valor pierda un 50% de su valor ya estás liquidado.
Es por ello que el apalancamiento puede ser una herramienta peligrosa para inversores novatos o que no sepan realmente en qué instrumento están invirtiendo. Recordemos que apalancamientos hay de muchos tipos, pueden ser 1:2, 1:3, 1:5…
Cuando no emplear Apalancamiento para invertir en bolsa.
Mi recomendación aquí es clara: en el 99.9% de tus operaciones no deberías emplear apalancamiento financiero. Si, es cierto que puede salirte muy bien y puedes ganar mucho, pero hemos hablado aquí muchas veces que lo más importante en bolsa es no perder dinero y emplear apalancamiento es el camino más fácil hacia la pérdida.
Por englobar, y bajo mi punto de vista, no deberías emplear apalancamiento en activos volátiles, ya que cualquier movimiento brusco del precio, si vas apalancado, puede echarte fuera. Y con activos volátiles también me refiero a acciones. Ten cuidado aquí porque no serías ni el primero ni el último en perder mucho dinero por emplear estos esteroides financieros.
Cuando emplear apalancamiento para invertir en bolsa.
Si, ya sabes que no me gustan mucho este tipo de herramientas. Sin embargo, he de reconocer que hay un determinado escenario donde me gusta usar el apalancamiento: Operaciones en índices intradía.
Muchas veces en mis redes sociales y en Boring Capital he hablado de posibles movimientos intradía en los índices como el S&P 500 en días de noticias importantes. Por ejemplo, recuerdo un día en el que Powell hablaba y, antes de su comparecencia, el mercado había caído mucho. Ahí era interesante ir largo en los índices pero, claro. Los índices son poco volátiles.
En uno de estos movimientos, como mucho, el NASDAQ te sube un 2 o 3%… No es mucho. Ahí es donde entra en juego el apalancamiento financiero. Con un ETF apalancado 3x, por ejemplo, podrías convertir ese 2% en un 6… Algo que ya está mejor.
Insisto, este es el único escenario donde empleo apalancamiento (muy poco frecuente dado que pocas veces estoy tan seguro de un movimiento intradía de este tipo).
En conclusión: el apalancamiento es una herramienta poderosa si se emplea bien (como todo), pero no es ni de lejos necesaria para ser rentable en bolsa. A veces es mejor ganar “poco” y no estar comprando papeletas para quebrar.